Inger Mendoza, ha demostrado un sinfín de veces su devoción por la maternidad y a través de las redes sociales comparte el buen trabajo que está haciendo con sus tres hijos frutos de su relación con el cantante criollo Nacho.
La ex bailarina, compartió recientemente un carrete con 4 fotografías de ella junto a los pequeños lavando los platos con un mensaje que hacia un llamado de atención para todos sus seguidores de fomentar la educación, valores, aprendizaje e igualdad.
“Hola. No soporto fregar. Chao. No, en serio, no lo soporto. Contrario a los que muchos piensan, no tengo niñeras y tampoco tengo ayudantes viviendo en la casa. Hay una señora maravillosa que me echa una mano con la limpieza profunda tres días a la semana, pero solo se queda durante la mañana. De resto, estoy sola la mayoría del tiempo porque mi esposo casi nunca está (cuando está, ayuda muchísimo con todo)”, expresó la bailarina
Aprovechó la oportunidad para hablar sobre su niñez y cómo no aprendió a hacer las labores domésticas, sino hasta el momento en que se vio obligada a hacerlas, a lo que se refirió: “Le decía a Erika de la Vega en su podcast “En defensa propia” que como son actividades que ‘ajuro’ debo hacer todos los días, tuve que buscar mil maneras de hacer más llevadera la tareita. Y la que más me ha funcionado es recurrir al agradecimiento. Cualquier deber del hogar que me parece fastidioso, lo convierto en un acto de agradecimiento”.
La esposa de Nacho también habló sobre el papel que juegan sus hijos en estas tareas diarias y lo importante que es inculcarles las responsabilidades que se deben cumplir en un hogar. “Además, trato siempre de involucrar a los niños a manera de juego así después haya más desastre que limpiar. No quiero criar varones que piensen que van a tener a alguien que les haga todo y, si tuviera niñas, tampoco quisiera que crecieran pensando que es su deber encargarse del hogar. Mantener una casa es tarea de todos lo que en ella habitan, no es cuestión de géneros”.